Fiesta fin de curso

El día 21 de junio con gran alegría e ilusión nos hemos reunido, niños, educadores y hermanas de nuestros dos Hogares situados en Madrid: Luis Amigó y El Olivo para poder celebrar el fin de curso y disfrutar del comienzo del verano. En la fiesta, por supuesto, nos han acompañado nuestros voluntarios, menores que en algún momento han formado parte de nuestra familia y se han reincorporado a sus familias biológicas o han cumplido la mayoría de edad, familias acogedoras de nuestros niños y familias colaboradoras, que durante el año hacen posible que nuestros niños y niñas tengas actividades, talleres, salidas, etc.

Comenzamos nuestra fiesta reuniéndonos en el porche del Hogar El Olivo realizando una pequeña dinámica de agradecimiento. El agradecimiento es nuestro tercer pulmón, ya que nos ayuda a respirar en la vida. Agradecer transforma nuestro corazón ya que nos damos cuenta de muchos aspectos positivos, bonitos y buenos que hay en nuestra vida diaria y nos ayuda a valorarlos.  Se ha invitado a cada participante a escribir en una hoja una acción de gracias. A continuación, íbamos pegando las hojitas de cada uno/a  en la pared formado un precioso árbol. Este árbol es el signo de nuestra familia que formamos todos los presentes en la fiesta. Nadie se queda fuera, todos somos necesarios. Después de la dinámica, pasamos a los juegos preparados con mucha dedicación y cariño por los educadores. Todos y todas han podido elegir los juegos y disfrutar participando en ellos. Ha sido un rato muy agradable y de mucha risa.

Más adelante, nuestros niños y niñas nos has sorprendido muy positivamente con las actuaciones anteriormente practicadas. Han preparado varios bailes y un precioso video. Hemos disfrutado muchísimo de este momento tan emotivo. Tampoco los educadores se han quedado atrás, el Equipo Educativo del Hogar El Olivo ha cantado una canción especialmente compuesta para esta ocasión. Ha sido una canción dedicada a sus niños y niñas. A través de ella hemos querido expresarles nuestro cariño y aprecio.

La fiesta finalizó con una deliciosa cena, a base de hamburguesas y platos con los que todos los asistentes quisieron colaborar. ¡Terminamos todos muy llenos!

Todo lo bueno termina rápido, así que tras un rato de baile, nos despedimos y nos deseamos felices vacaciones. Esperemos repetir esta experiencia el año que viene.