Se acabaron las clases virtuales, los millones de deberes, las plataformas, los correos, etcétera, etcétera, aunque lo malo es que el virus sigue por aquí…
Desde abril, el tiempo se nos ha pasado muy rápido, pero nos han pasado muchas cosas:
Hemos dado la bienvenida a dos niñas nuevas que se han adaptado muy bien. Con ellas hemos seguido haciendo deberes, hemos celebrado los cumples, pero ahora ¡en el jardín! Y jugamos todo el tiempo que podemos. Hemos podido festejar el mes de María. Cada uno/a expresaba una intención en voz alta: pedíamos por nuestras familias, amistades por las personas afectadas por la Covid, etc. y después de cada petición rezábamos un Ave María. También aprendimos una canción nueva que nos encanta: María, mírame.
Hemos podido salir a dar paseos (POR FIN). Al principio estábamos emocionados/as y no lo podíamos creer: SALÍAMOS A LA CALLE. Poco a poco nos fuimos acostumbrando a los paseos de las 18 y ahora con el calor nos da hasta pereza salir, y preferimos quedarnos en el jardín mojándonos con la manguera. Gracias a nuestras caminatas nos hemos acostumbrado a llevar mascarillas y, aunque nos tocamos la cara de vez en cuando, porque el coronavirus nos pone trampas para que nos rasquemos y meterse dentro, nosotras/os aguantamos todo el tiempo con ella y no nos quejamos.
La más importante de las novedades que tenemos que contaros es que…desde hace pocos días ¡NOS PUEDEN VISITAR LOS PAPÁS Y MAMÁS!, aunque con mucho cuidado y un protocolo muy estricto, pero recibimos sus visitas que nos alegran después de tanto tiempo sin vernos. Incluso dentro de muy poquito tiempo podremos salir con ellas y ellos.
Para terminar, contaros que 2 chicas y 1 chico de El Olivo hemos recibido los premios al esfuerzo de la Comunidad de Madrid por nuestro trabajo, dedicación y estudio a lo largo de todo el curso. Desde el Olivo os queremos desear ¡BUEN VERANO Y QUE DISFRUTEIS DE LAS VACACIONES!